Bonos de carbono: un mercado que aun está verde en Vaca Muerta
Si bien hay petroleras que compensan la huella de carbono con soluciones basadas en la naturaleza, el mercado aún necesita reglas claras en el país.
Uno de los grandes desafíos de la industria petrolera a nivel mundial es la reducción de la huella de carbono en el largo camino hacia fuentes de energía más limpias. Si bien Vaca Muerta arranca con destacadas ventajas comparativas en ese sentido, aún el país está en pañales en el desarrollo de una herramienta clave para compensar las emisiones, como son los mercado de carbono.
Se trata de un negocio que está creciendo a nivel regional y global, y que ya empezó a involucrar a las petroleras. Sin embargo, desde la Mesa de Carbono Forestal Ambiental (MCFN), integrada por unas 30 empresas e instituciones, indicaron que en el país aún hay muchas incertidumbres para que se desarrolle un mercado que sea atractivo y confiable para el desarrollo de este tipo de proyectos.
“El contexto argentino dista mucho de brindar la seguridad jurídica y certidumbre mínima necesaria para promover e incentivar el desarrollo, certificación e implementación de proyectos de captura y reducción de emisiones, como así también la consecuente comercialización de los certificados, créditos o bonos de carbono”, señala un informe elaborado por la mesa.
Piden que no apliquen impuestos a los bonos verdes
El documento fue elaborado como un aporte a la construcción de marcos normativos e instrumentos de política pública para promover esos instrumentos en el país. Una de las cuestiones centrales que se plantean es que es crítico contar con claridad respecto a cómo el país espera lograr las reducciones de emisiones comprometidas ante la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
Además, advierten que para evitar la doble contabilidad en la captura y reducción de emisiones, es necesario haya un registro transparente y accesible de los proyectos registrados, como así también de las unidades de capturas y reducciones emitidas y comercializadas.
La mesa indica que no deben cobrarse tasas administrativas en los procesos de registro, de seguimiento a la implementación y ciclo de vida de los proyectos, ni cobrarse impuestos a la comercialización.
El mercado de carbono en Argentina
En Argentina se desarrollan proyectos de carbono forestal desde hace más de 15 años en distintas regiones sobre unas 20.000 hectáreas y con un potencial de mitigación de más de 1.600.000 toneladas de CO2, de los cuales ya se llevan mitigadas más de 500.000 toneladas. Hoy existen proyectos en desarrollo y certificación por una superficie de más de 70.000 hectáreas, equivalentes a más de tres veces la superficie de la Ciudad de Buenos Aires.
Los mercados de carbono son sistemas en donde gobiernos, empresas e individuos pueden comprar y vender unidades (créditos), ya sea para respaldar las emisiones de GEI o bien para compensarlas. Hoy hay una gran demanda por parte de empresas que quieren equilibrar su huella de carbono, especialmente orientada a soluciones basadas en la naturaleza (NBS por sus siglas en inglés).
La oferta de NBS está muy por debajo de la demanda internacional, lo que significa que el sector tiene un alto potencial inversor. Existen diversos programas y estándares internacionales que buscan garantizar la calidad y veracidad de los créditos, como el Mecanismo de Desarrollo Limpio, el Verified Carbon Standard de Verra, y la certificación The Gold Standard3.
Actualmente existen al menos 170 tipos de tecnologías para generación de créditos de carbono a través de la captura y reducción de emisiones, tanto del sector forestal y del uso del suelo, como de los sectores de los hidrocarburos, energías renovables, eficiencia energética, producción industrial, transporte, gestión de residuos y agricultura.
En el mundo hay más de 11.800 proyectos certificados y registrados bajo estándares internacionales. Mientras que en Argentina los mayores avances a nivel gubernamental los han realizado las provincias de Misiones y Jujuy.
Vaca Muerta y las soluciones basadas en la naturaleza
En el caso de Neuquén, la pionera en Vaca Muerta es Vista, que semanas atrás firmó un convenio con el gobierno provincial para estudiar la factibilidad de la compensación de las emisiones de carbono que genera la actividad petrolera, mediante la reconversión forestal a través de plantaciones existentes en la localidad de Huinganco.
A fines de 2022, Vista creó la firma Aike NBS SAU, una subsidiaria conformada por expertos locales que apoya a la petrolera en la generación de créditos de carbono de alta calidad. Aike está ejecutando 9 proyectos de NBS para Vista en Argentina, cubriendo 26,000 hectáreas, en 4 provincias.
La compañía que dirige Miguel Galuccio también se ha destacado por medir las emisiones de CO2 de la producción de shale oil exportada con Trafigura, para compensar la huella de carbono a través de la compra de bonos verdes procedentes de soluciones basadas en la naturaleza.
Mientras que Mercuria, el holding que controla la petrolera Phoenix Global Resources, que tiene importantes activos en Vaca Muerta, tiene un acuerdo con la provincia de Misiones para la compra-venta de bonos verdes de la selva de esa provincia.
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