Las pymes les piden un blindaje a las operadoras
Unas 600 empresas que están enroladas en CEIPA, Capespe y Adeneu buscan que ante la crisis del COVID-19 las operadoras prioricen la "paquetización" local.
Las pymes transitan otro capítulo para sostenerse en estos meses, tras la lenta vuelta a la actividad en Vaca Muerta, con las restricciones y costos adicionales que impone la pandemia del coronavirus (COVID-19) para circular hasta la zona hidrocarburífera.
Hoy las empresas están buceando en las expectativas futuras de estos meses, en función de los que pueden facturar las operadoras; no solo para pagar sueldos, sino también las deudas con proveedores y los bancos al no haber podido trabajar (en algunos casos) por tres meses durante el aislamiento que frenó unos 29 equipos de perforación en la Cuenca Neuquina.
Frente a las restricciones del coronavirus, hoy más de 600 pymes neuquinas, enroladas en CEIPA, Capespe y Adeneu, se reunieron con el ministro de Producción e Industria de la Provincia de Neuquén, Facundo López Raggi, para plantearle una suerte de “blindaje” en esta etapa de Vaca Muerta, para priorizar los servicios de empresas locales.
¿Qué es lo que le han pedido? Una evaluación en algunos puntos de la Ley de Compre Neuquino, para que las operadoras tengan la prioridad de realizar contrataciones en forma de paquetes, pero con toda la cadena de servicios que se ofrecen en la región. Todo en el contexto de la pandemia.
“Tenemos que empezar a desarrollar servicios con las asociaciones de empresas locales. Sigue la idea de paquetizar servicios, con empresas locales y ampliando el horizonte a empresas regionales”, indicó a +e Edgardo Phielipp, secretario de la Federación de Cámaras Energéticas de la Provincia del Neuquén (Fecene).
La idea no es generar una suerte de “chauvinismo” empresarial a favor solo de las compañías locales, ya que este esquema no es posible debido a la complejidad de los servicios que se prestan en el sector hidrocarburífero y que no pueden ser cubiertos en su totalidad con la oferta local.
Es que frente a las restricciones que impone el COVID-19, las cámaras pyme quieren que las operadoras opten por contratar servicios locales antes que de otras provincias.
“Hay empresas que no pueden pagar los sueldos y están en esa condición, con el tema de los servicios paquetizados que nos quieren imponer vamos a ser muy duros, sobre todo en este contexto que tenemos que priorizar el empleo local”, dijo el empresario.
Indicó que de la reunión que tuvieron con el gobierno provincial salió la idea de pedir a las operadoras cuál será el plan de trabajo para la pospandemia y los servicios que se empezarán a requerir a medida que se reactive la producción con la suba de equipos.
Por estos días, las pymes están volviendo a trabajar en Vaca Muerta con el cumplimiento estricto de los protocolos hidrocarburíferos para prevenir la pandemia, con hisopados para el personal que cumple 14 días en el campo, fuera de la zona de circulación comunitaria en aglomerado de Neuquén capital, Centenario y Plottier.
Un escenario de drama
Como ya viene informando +e, el escenario de las pymes está atravesando un momento muy delicado y algunas corren riesgo de cerrar sus puertas. Algunas no han podido pagar sus sueldos en tiempo y forma, más allá de la ayuda del programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y a la Producción (ATP) que paga hasta el 40% de los salarios del sector privado que está en crisis.
Pero también tuvieron que enfrentar otro drama: las operadoras que les debían facturas impagas intentan cancelar la deuda con una quita del 30%. Son trabajos que se facturaron hasta febrero, antes de la pandemia, y forman parte del achique que hicieron las operadoras por el desplome del Brent.
Las facturas se cobraron en abril y mayo y las pymes sobrevivieron con algo de dinero, pero al no poder facturar trabajos de mantenimiento durante la pandemia ahora tienen que salir a trabajar, pero sin financiamiento.
“Nosotros lo que estamos evitando es la tercerización, que es un mecanismo que se usaba antes por parte de las empresas operadoras, donde contrataban compañías de transporte en Buenos Aires, venían a Neuquén y después subcontrataban en la provincia, este esquema no lo queremos más”, sostuvo Phielipp.
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