Bolivia: entre la obligación de seguir explorando y la esperanza de Mayaya
El descubrimiento del pozo Mayaya renovó las expectativas en Bolivia. Las oportunidades de exploración de gas que le quedan a la industria.
Bolivia anunció el descubrimiento de Mayaya y generó grandes expectativas en la industria hidrocarburífera. YPFB adelantó que el proyecto podría convertirse en el tercer bloque productor del país. Las proyecciones marcan que el pozo Mayaya Centro X1 tendría un potencial de 1,7 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés) de gas.
En este marco, el presidente de Bolivia, Luis Arce, afirmó que se trata del mayor descubrimiento en el país desde 2005 y que la economía del país está en proceso de recuperación.
“Este campo reaviva nuevamente el espíritu en todo el país de que la economía está en franco proceso de recuperación. 1,7 TCF no lo hace un campo pequeño, es desde 2005 el descubrimiento más grande que estamos haciendo”, afirmó el mandatario boliviano.
Seguir explorando
Álvaro Ríos Roca, socio director de Gas Energy Latín América, celebró el descubrimiento de Mayaya, pero consideró que hay que seguir explorando para evitar que aumenten las importaciones de energía.
“Hay buenos indicios de que es una zona potencial productora de hidrocarburos en Bolivia. Se han hecho las detecciones iniciales. Sin embargo, creo que faltan algunas pruebas geológicas concluyentes para ver cuánto de reserva se tiene y cuánto de producción se puede producir adicionalmente”, afirmó el especialista en diálogo con +e.
“Todavía es muy prematuro para cantar cuánto de reserva tiene y cuánto de producción se podría tener. Pero sin duda, es una nueva área potencial en Bolivia”, agregó.
Para Ríos Roca es importante que el país andino tome conciencia del impacto de ser un importador de energía. “Bolivia no puede quedar importando todas sus necesidades energéticas. La exploración debe continuar en Bolivia porque importando todo le sale muy duro para su economía y para los dólares que necesita el país”, subrayó.
El potencial de Mayaya
En tanto, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, informó que se avanza con los trabajos de topografía para trasladar los hidrocarburos hasta la estación de Sica Sica.
“Ya estamos trabajando en la topografía para ver cómo evacuar el hidrocarburo que saldría desde Mayaya hasta Sica Sica que sería la evacuación primera que tendríamos del hidrocarburo, ya estamos haciendo las primeras obras topográficas para ver cómo se va a evacuar el producto”, informó en su visita al pozo.
De acuerdo con el plan, se tiene previsto perforar dos pozos de delimitación: el X2 y el X3, pero también se desarrollarán los trabajos para poder evacuar los hidrocarburos producidos.
Dorgathen estimó de tres a cuatro años para realizar la infraestructura que permita evacuar los hidrocarburos desde Mayaya hasta Sica Sica. Además, se realizará el diseño de un ducto para este propósito.
Afirmó que los trabajos correrán por cuenta de la petrolera estatal ya que fue la quien realizó el 100% de la inversión para la exploración del pozo Mayaya Centro-X1.
“Una vez que se ha descubierto el pozo se tienen que hacer las inversiones necesarias. Todo lo que significa esas inversiones podrían superar los 1.300 (millones) a 1.500 millones de dólares de inversión”, dijo el ministro de Hidrocarburos y Energías de Bolivia, Franklin Molina.
En contrapartida, afirmó que la explotación de ese pozo hidrocarburífero generará una renta petrolera aproximada de 6.000 millones de dólares.
Asimismo, el funcionario anunció que se desarrollarán tres pozos delimitadores y la construcción del ducto de interconexión para la producción de hasta 10 millones de metros cúbicos (MMm3) de gas natural y de 500 a 1.000 barriles de petróleo por día. Lo que se traducirá en ingresos de aproximadamente de 6.800 millones de dólares “en la vida total de este proyecto”.
El marco regulatorio de Bolivia
Ríos Roca describió las oportunidades de exploración que le quedan a Bolivia. “En el subandino sur, que es donde tradicionalmente se ha sacado el gas, existen, yo diría, 15 o 20 prospectos adicionales que hay que perforar. Y en el subandino norte, donde está el pozo Mayaya, hay muchos prospectos que se pueden visualizar, pero que hay que explorar”, aseveró.
Asimismo, el exministro de Hidrocarburos del país andino manifestó que Bolivia debe cambiar las reglas de juego y avanzar hacia un marco jurídico más atractivo para las inversiones extranjeras. “El que tenemos es muy duro, muy cerrado a la inversión extranjera, y no causa los suficientes incentivos para que empresas internacionales exploren en Bolivia”, evaluó.
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