Qué posibilidades tiene la cadena de valor del litio

El presidente de Y-TEC, Roberto Salvarezza, anunció que en septiembre se pondrá en marcha la primera planta de desarrollo tecnológico de celdas y baterías de litio de Latinoamérica, que funcionará en conjunto con la Universidad Nacional de La Plata.

“Argentina puede tener la ventaja de ser el dueño del recurso y ser el proveedor del elemento crítico de la electromovilidad, que es la batería. Pero tenemos que jugar con inteligencia. Eso es lo que tenemos que mirar con mucho cuidado”, subrayó.

El presidente del Directorio de Y-TEC y de YPF Litio, investigador Superior del CONICET, y doctor en Bioquímica, realizó estas declaraciones en el streaming de Energía y Minería, organizado por Ambito.com, junto a distintos actores de ambos sectores. Allí, Salvarezza destacó la importancia de industrializar el litio, que hoy aparece como un recurso fundamental para la transición energética hacia energías más limpias, y negó que el desarrollo de baterías implique involucrar al país en una competencia comercial con China, el principal desarrollador mundial en éste sentido.

“Y-TEC apuesta a las energías renovables, y ahí aparece el litio como recurso para almacenar energía y el hidrógeno. Y aunque la electromovilidad es incipiente en el país, también tenemos la batería de ion litio. El litio lo podes llevar a carbonato de litio y luego transformarlo en un producto de mayor valor agregado, y transformarlo en una batería”, explicó desde lo técnico.

“el desarrollo de la cadena de valor alrededor de la actividad minera es prioridad para nuestro gobierno y debemos generar las condiciones para que nuestro país sea un actor clave a nivel mundial”, señaló en el mismo evento la secretaria de Minería, Fernanda Ávila.

A principios de 2023, a partir del trabajo en conjunto de la provincia de Catamarca e Y-TEC, se firmó un convenio por el cual la empresa minera estadounidense Livent proveerá el carbonato de litio para abastecer a UNILIB, la primera planta de desarrollo tecnológico de celdas y baterías de Latinoamérica.

“Es importante para nosotros contar con el carbonato de litio para hacer realidad un emprendimiento que tiene más de 12 años de investigación científica. De esta manera, las primeras celdas argentinas serán producidas con carbonato de litio catamarqueño”, siguió Salvarezza.

La planta tendrá una capacidad de producción anual -medida en energía almacenada- de 15 MWh, equivalente a 2000 baterías para almacenamiento estacionario de energías renovables o unos 300 para autos eléctricos.

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“Es una planta de desarrollo tecnológico y tiene una escala industrial. De ahí se pasa a Santiago del Estero donde hay una planta mucho más grande. Para que se entienda, muchas celdas constituyen una batería. Esta es una planta de celdas. Estuvimos desarrollando celdas en una planta piloto”, dijo mientras mostraba el producto que se estuvo desarrollando. “Para el mercado argentino, esto está bien”, agregó respecto del nivel de industrialización y agregado de valor del que se estaba hablando.

En cuanto a la integración de la cadena de valor que se intenta desarrollar, el científico señaló: “el litio que vamos a utilizar es de carbonato del litio de Catamarca, el aluminio lo trabajamos con Aluar. Es decir, hemos elegido tecnología que tiene un alto contenido de integración”.

“Hoy las baterías tienen un espacio regional. Se están construyendo autos en Brasil, y el 30% del valor del coche es la batería”, dijo al referirse al riesgo de entrar en una competencia comercial con China por el mercado de las baterías.

Argentina hoy es el cuarto exportador del denominado “oro blanco”, y actualmente, se posiciona en el mercado con una capacidad de producción instalada de 37,5 mil toneladas de carbonato de litio y una producción anual promedio de 33 mil toneladas.

“Las perspectivas –del desarrollo energético argentino- son óptimas porque tiene los mejores vientos del planeta en intensidad y continuidad, la radiación solar en el norte, tenemos el litio que es un recurso nos va a permitir almacenar y disponer de energía cuando queramos, tenemos el gas para transitar la transición energética, y tenemos el petróleo para exportar y bajar las emisiones de otros países que todavía siguen usando carbón”, resumió.