El GNL reconfigura el mapa laboral del petróleo y el gas en el mundo
Un relevamiento de la Agencia Internacional de la Energía mostró una suba interanual de 210 mil puestos en el sector, con un crecimiento concentrado en proyectos de GNL.
En los últimos años, el empleo en el sector de petróleo y gas alcanzó a 12,4 millones de personas a nivel mundial, lo que representó un aumento interanual de 210.000 puestos de trabajo, impulsado principalmente por el avance de nuevos proyectos de gas natural licuado (GNL). Así lo señala un informe de la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés), que analizó el desempeño de la industria durante 2024.
Aun así, el nivel de ocupación sigue por debajo de los registros previos a la pandemia, lo que refleja un proceso de recomposición más lento tras los recortes aplicados durante la crisis sanitaria.
La situación laboral en el sector hidrocarburífero
Según el relevamiento, cerca de dos tercios de los trabajadores del sector se desempeñan en actividades vinculadas al petróleo, mientras que el resto corresponde al gas natural. En términos absolutos, la oferta petrolera sumó unos 142.000 empleos en 2024, frente a 73.000 nuevos puestos en el segmento gasífero.
En el caso del gas, la expansión estuvo asociada casi exclusivamente a la construcción de nuevas instalaciones de GNL y a la fabricación de equipamiento industrial, sin contemplar empleo en generación eléctrica ni en comercialización.
Distribución mundial del empleo en petróleo y gas
El empleo en petróleo y gas mostró una leve caída en economías avanzadas, mientras que el incremento se concentró casi exclusivamente en los países emergentes y en desarrollo. En ese grupo, excluyendo a China, se incorporaron más de 260.000 trabajadores en 2024, con un aumento interanual del 3%, explica el reporte de la IEA.
Gran parte de estos puestos estuvo vinculada al desarrollo de pozos y de infraestructura de soporte, tanto para la explotación de nuevos campos como para el mantenimiento de la producción en activos existentes. Aproximadamente un tercio de la fuerza laboral participó en proyectos de expansión de capacidad productiva, incluyendo tareas de perforación, montaje mecánico e instalación de infraestructura.
La IEA señala que la creación de empleo estuvo asociada a proyectos específicos en distintas regiones. En el sudeste asiático se destacó el desarrollo del proyecto integrado Block B-O Mon, en Vietnam, con una capacidad de producción de 490 millones de pies cúbicos diarios.
En África, el informe menciona el avance del desarrollo petrolero Tilenga en Uganda y del Oleoducto de Crudo de África Oriental (EACOP), que durante su fase de construcción genera alrededor de 22.000 empleos locales directos.
Dónde se concentra el mayor peso laboral del sector
Según el análisis de la organización, Medio Oriente continúa siendo la principal región en términos de empleo en petróleo y gas, con más de una quinta parte de la fuerza laboral global del sector. En la región, los hidrocarburos representan cerca de dos tercios del empleo energético total, frente a un promedio mundial del 16%.
Durante 2024, las empresas de esta zona incrementaron un 10% sus inversiones en la oferta de crudo y gas, lo que permitió la creación de unos 83.000 nuevos puestos de trabajo.
El GNL, motor del empleo en el sector del gas
El GNL se consolidó como el principal impulsor del empleo en el segmento gasífero. Las inversiones globales en GNL crecieron un 11% respecto de 2023, lideradas por América del Norte y Medio Oriente, que concentraron cerca del 40% del gasto total.
Este ciclo de expansión estuvo respaldado por distintos proyectos en construcción durante 2024, entre ellos Ruwais en Emiratos Árabes Unidos, Marsa en Omán, North Field South en Qatar y Cedar en Canadá, además del inicio de producción en nuevas plantas como Plaquemines, en Estados Unidos. De cara a 2030, se prevé que entren en operación casi 300.000 millones de metros cúbicos anuales de nueva capacidad exportadora de GNL.
Desafíos: la escasez de mano de obra
El informe advierte que el actual ciclo de inversiones en GNL estuvo acompañado por una escasez de mano de obra calificada, en particular soldadores, montadores de cañerías y electricistas. Esta situación presionó al alza los salarios y los costos de desarrollo.
En Estados Unidos, los salarios en la construcción de plantas de GNL aumentaron alrededor de un 20% desde 2021. En algunos mercados, este contexto favorece el impulso de proyectos de GNL flotante, que requieren menores inversiones iniciales, señala la IEA.
Finalmente, en su análisis, la organización plantea un amplio rango de escenarios para el empleo en petróleo y gas hacia 2035, con una fuerza laboral a nivel mundial que podría ubicarse entre 6,9 y 13,4 millones de trabajadores.
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