El fracking manda señales
Vaca Muerta. El número de etapas de fractura llegó a 325. YPF volvió a la actividad después de la paralización por la pandemia. Shelll y Vista se consolidan.
Vaca Muerta alcanzó el nivel más alto de etapas de fractura desde abril: en total, fueron 325 en septiembre. Otro dato importante de este momento es la reincorporación de YPF a la actividad del fracking, cumpliéndose así el anuncio que hizo la propia compañía hace un mes para subir en el corto plazo un set de fractura y dos equipos perforadores.
De acuerdo con los datos suministrados por NCS Multistage, en un relevamiento mensual que realiza Luciano Fucello sobre el principal indicador de la industria de los hidrocarburos no convencionales, el salto se dio por el trabajo de estas tres operadoras y de las compañías de servicios especiales Halliburton y Schlumberger.
Si bien es alentador como un indicador de vuelta a la actividad, el fracking sigue por debajo de las 400 etapas que se hacían en la prepandemia. Y todavía suena lejano regresar a las 700 que se realizaban en el primer semestre del 2019.
Shell Argentina lideró el número de fracturas, con 145 y siendo esta operadora la que reactivó el movimiento de fracturas en todos estos meses de cuarentena con la reanudación de sus trabajos en Bajada de Añelo. Las tareas las realizó Halliburton.
La angloholandesa tiene también a Cruz de Lorena y Sierras Blancas, dos áreas con objetivo en la roca shale a las que esperaba llevar a desarrollo masivo, pero la macroeconomía y luego la pandemia obligaron a retrasar los planes.
La segunda operadora que tuvo más fracturas este mes fue Vista Oil & Gas. La compañía que timonea Bajada del Palo Oeste sigue recuperando su producción de shale oil y en el noveno mes del año alcanzó una actividad de fracking de 132, realizadas por Schlumberger. De este modo, la empresa creada por Miguel Galuccio retoma con fuerza su plan de perforación.
El rol de la petrolera estatal
El regreso de YPF es sin dudas la buena noticia para el fracking y le otorga una nueva perspectiva al horizonte de la industria para los próximos meses. Después del recorte del 50% en Loma Campana en abril por la baja de la demanda y para evitar el colapso de los sistemas de almacenamiento, la petrolera estatal frenó todos sus sets de fractura.
De acuerdo con NCS Multistage, en septiembre la compañía que controla el Estado nacional terminó 48 etapas de fractura en Loma Campana. Esta área también había tenido un alza de su producción por la reapertura de pozos y se espera una recuperación del que ya es todo un emblema del shale oil en Vaca Muerta.
Además, el acuerdo con los sindicatos permitirá tener condiciones laborales en el contexto de la pandemia con la mirada puesta en el desarrollo de Vaca Muerta.
Las fracturas que solicitó la petrolera estatal estuvieron a cargo de Halliburton, convirtiéndose así en la compañía de servicios que domina el segmento del fracking para la roca shale de la Cuenca Neuquina.
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