sector

Reglas claras, la clave para el sector energético

La estabilidad fiscal es el principal requisito a largo plazo para impulsar la industria hidrocarburífera.

En Argentina se habla frecuentemente de las inmensas oportunidades del sector energético, ¿cuál es la ventana de oportunidad que tiene el país para poder maximizar dichas oportunidades? Esa fue la pregunta inicial de Alejandro Díaz, CEO de AmCham Argentina, a Daniel Gerold, director de G&G Energy Consultants, en el marco del conversatorio que se llevó a cabo en AmCham Space.

“Argentina se encuentra con una serie de recursos de escala mundial y de alguna forma, considerable. La oportunidad es que eso contribuya a equilibrar la macroeconomía del país. No es el sector que vaya a ser el más grande de la Argentina pero, puede contribuir porque es un sector que puede crecer rápido”, respondió Gerold.

Y continuó su argumentación al decir: “No es que vamos a ser Arabia o EEUU pero, teniendo en cuenta el tamaño y las necesidades de Argentina, creo que hay una posibilidad de crecer de manera sostenida y ser un eslabón clave en una crisis estructural. Siempre fue el talón de Aquiles, no digo de los gobiernos sino que siempre hubo problemas con las importaciones”.

En este punto, se impuso un tema clave: Teniendo en cuenta que Vaca Muerta es la segunda reserva mundial de gas y la cuarta reserva mundial de petróleo. Entonces, ¿por qué no se puede ser EEUU? “Ese país tiene una industria petrolera y de servicios sumamente dinámica con un acceso a capital enorme. Las reglas son las mismas desde hace años”.

Argentina carece de estabilidad regulatoria. Acá las reglas no son las mismas y muchas veces los distintos gobiernos y dirigentes políticos siempre están tentados de cambiarlas. Ese es el primer factor que nos diferencia de EEUU y Argentina debiera trabajar: las leyes que están hay que respetarlas y cumplirlas”, dijo Gerold.

El segundo tema en cuestión es el acceso al capital y, según el consultor, “tenemos una roca extraordinariamente buena y los recursos de las empresas para desarrollarla. Pero nos falta el capital y sabemos que va hacia donde haya estabilidad y rentabilidad. Eso nos falta”.

Qué hay detrás de la estabilidad

Díaz planteó que las necesidades del sector para acelerar el proceso de inversión se desglosa en varias cuestiones. Desde la estabilidad macroeconómica hasta la necesidad de incorporar algunos cambios regulatorios en el sector y la urgencia de entender que se debe transmitir confianza de permanencia y que no cambie todo cada cuatro años.

“Es la sumatoria de todo eso. Nosotros no tenemos muy buenos antecedentes y ese es el desafío. Ahora, en pocos meses, va a haber un cambio de gobierno y quizá se ratifique una línea de funcionamiento y se corrijan las cosas que faltan”, apuntó Gerold.

En este punto, el consultor dijo que “se debe corregir el acceso a divisas, que es sumamente importante. Lo que se hizo se logró con el capital que había acá. Bueno, para jugar en la Primera A, tenemos que dar un salto y creo que eso se logra con el capital y el respeto a las reglas y las instituciones”.

“El gasoducto es un hito porque desde hacía 4 décadas no había uno nuevo. Es solo una primera etapa, un arranque y creo que va a ser importante porque en 2024 y 2025 va a reducir muchísimo las importaciones de GNL y Gas Oil para generación eléctrica. También hará que la producción de gas crezca”, comentó Gerold.

En este punto, el analista aseguró que estaba pasando “fuera del radar el oleoducto nuevo que está duplicando el actual. Esto también es un hito y quizá de mayor valor porque va a permitir exportar petróleo, que tiene un precio más alto que el gas”.

La brecha entre bajar importaciones a exportar

¿Es real la idea de transformarse en un gran exportador de gas? ¿Es posible en los próximos años? ¿Qué falta para que sea viable?, preguntó Díaz y Gerold fue categórico: “Eso requiere de una planta de licuefacción del gas que permita transportar GNL en barco. Eso es de muy largo plazo, requiere 6.000 millones de dólares para el primer módulo. Tarda mucho. Es factible porque el recurso lo tenés, pero es algo para el largo plazo”, opinó el analista.

En este punto, la pregunta que sobrevuela es si, en tiempos de transición energética, el plan no se contrapone al largo plazo del que habla Gerold. “Creo que no llegaremos tarde porque el hecho de captar el incremento de la demanda de energía del mundo de fuentes alternativas ya requiere un capital extraordinario. Creo que el petróleo y en mayor medida el gas, van a tener un rol importante en esta transición”.

Para terminar, Gerold dejó una reflexión (optimista) para cerrar la charla: “Hace muchos años no se le encontraba la vuelta para que fuera un recurso económicamente desarrollable, y ahora sí. Se necesita petróleo, se necesita gas y creo que buena parte de la clase política tiene claro de la necesidad de generar condiciones”.

En esta nota

Dejá tu comentario

Las más leídas