Argentina aspira a integrar el top 10 de cobre para 2030
El país busca atraer a jugadores globales con una postura favorable a los inversores. Los proyectos podrían generar 793 mil toneladas de cobre en esta década.
Argentina busca convertirse en uno de los 10 principales productores globales de cobre para 2030, con una postura favorable a los inversores que atrae a jugadores globales como Glencore y Lundin Mining.
El país tiene una cartera de proyectos de cobre que podrían generar 793.000 toneladas para finales de la década, según muestran las estimaciones del Gobierno, todavía muy por debajo de las de su vecino Chile, el mayor productor mundial, pero cerca de grandes productores como Australia y Zambia.
Si bien es un objetivo ambicioso -Argentina no produce cobre desde que la mina Alumbrera cerró en 2018-, esto podría posicionar al país como un nuevo proveedor importante de cobre a medida que aumenta la demanda mundial del metal por el impulso global a la electromovilidad.
El sendero virtuoso es liderado por el proyecto Josemaría, de Lundin Mining, en la provincia andina de San Juan, que tiene el objetivo de producir unas 136.000 toneladas de cobre al año.
"Argentina tiene importantes reservas de cobre", señaló a Reuters Carolina Laumann, gerenta de Comunicaciones de Josemaría, quien agregó que la meta para 2023 es concluir con la revisión de ingeniería, acuerdos de infraestructura y permisos clave para luego avanzar hacia una etapa de financiamiento.
Una vez que la construcción completa de la mina comience, podría demandar entre 4 y 5 años el inicio de la producción, lo que sugiere una potencial demora al plan original de comenzar a producir en 2026, agregó.
Laumann dijo que el país podría convertirse en un "jugador clave en la reducción de la brecha entre la producción actual y la demanda futura de cobre en la transición energética a la energía limpia".
"Potencial inmenso"
Además de Josemaría, otros proyectos importantes de cobre son El Pachón, de Glencore, con una inversión de 4.500 millones de dólares; MARA, de Yamana Gold Inc, Glencore y Newmont Corp; Taca Taca, de First Quantum Minerals Ltd., y Los Azules, de McEwen Mining.
En total, Argentina tiene ocho proyectos grandes, con un CAPEX (gasto de capital) combinado de 22.200 millones de dólares, mostró un informe reciente del Gobierno nacional. Cinco están en San Juan y hay otros tres en Mendoza, Catamarca y Salta, todos en el norte y el oeste del país, sobre la cordillera de los Andes que comparte con Chile.
Según el informe "Argentina, Misión 8", del Ministerio de Economía y la Fundación Fundar, el país podría posicionarse en 2030 entre los 10 principales productores del mundo.
"Con Pachón, Altar y Los Azules sumamos un inmenso potencial en materia de cobre que el mundo está pidiendo para la transformación energética que ya está iniciada", dijo a Reuters Carlos Astudillo, ministro de Minería de San Juan.
Josemaría ya tiene la declaración de impacto ambiental aprobada, Los Azules ha presentado su respectivo informe de impacto y El Pachón está avanzando hacia la fase de producción debido al apoyo político al proyecto, agregó Astudillo.
Demanda de vehículos eléctricos
Argentina, el cuarto productor de litio del mundo, está interesada en incentivar la minería, considerada un fuerte empleador e impulsor de las exportaciones, lo que podría ayudar al endeudado país a traer las divisas que tanto necesita.
Víctor Delbuono, economista especializado en minería de la Fundación Fundar que trabajó en el último informe minero del Gobierno, dijo que Argentina construyó una sólida cartera de proyectos de cobre y atrajo inversiones en los últimos años.
Pero sostuvo que el país necesita mejorar su complejo mercado de cambios, con estrictos controles de capital, y ajustar el esquema impositivo del sector para ayudar a consolidar el desarrollo de la minería hacia 2030.
"Argentina tiene un diferencial para el cobre. Por un lado, tiene una cartera única de proyectos de clase mundial ya factibilizados y, por otro, en los últimos años se ha vuelto un destino para la inversión comparativamente más competitivo en relación a la región", dijo Delbuono.
El fabricante de autos Stellantis anunció en febrero que había invertido 155 millones de dólares en la compra de una participación minoritaria en la mina de cobre "Los Azules", como parte de su esfuerzo por asegurarse materias primas para las baterías de los coches eléctricos.
"Los proyectos que tenemos son de una importancia y relevancia a nivel mundial porque se estima que la demanda de cobre de acá a 2050 se puede multiplicar", dijo a Reuters Franco Mignacco, presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM). Se estima que la demanda de cobre se duplicará a 50 millones de toneladas para 2050 desde los niveles de 2020.
"Van a hacer falta los proyectos que tenemos y muchos más", concluyó.
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