Loma Campana encabeza la innovación y productividad del shale oil
El área Loma Campana es un hub de desarrollo e innovación para el no convencional neuquino, que luego se extiende a Vaca Muerta.
El área Loma Campana, que forma parte del acuerdo de asociación de YPF y Chevrón desde 2013, es un hub de desarrollo e innovación para el no convencional neuquino, en donde se ponen a prueba las técnicas de producción y de los nuevos equipos que luego se extienden a buena parte de las operaciones en Vaca Muerta.
Loma Campana es el primer desarrollo de no convencional del país y de YPF, el más importante fuera de los Estados Unidos, y como tal es el bloque de mayor producción de crudo no convencional del país con un nivel relevado a mayo de 80.313 barriles diarios, de acuerdo a las últimas cifras disponibles de la Secretaría de Energía.
Allí, las dos compañías que mañana cumplirán 10 años de la firma del acuerdo de asociación, llevan invertidos unos US$ 7.500 millones, casi un 30 por ciento de lo que viene recibiendo toda la formación, pero menos de la mitad de los US$ 16.200 millones para los 35 años de su desarrollo.
Con YPF como operador del bloque y Chevrón como socio tecnológico, Loma Campana marcó el ritmo de productividad de Vaca Muerta que viene mejorando año a año por la incorporación de tecnología y aprendizaje de la aplicación de la técnica en la roca con pozos más largos, geonavegación, estimulación tipo HDC, drawdown optimizado.
Así, el costo de desarrollo se ubica hoy en torno a los 8 dólares el barril, un valor muy competitivo con el Permian de los Estados Unidos, referencia global de la industria para el no convencional y que marcó la revolución energética de aquel país de los últimos 15 años.
Loma Campana desde su conformación que marcó el inicio del desarrollo masivo de la formación, acortó la curva de aprendizaje para el resto de los desarrollos no convencionales de YPF y que hoy se destacan por su productividad como La Amarga Chica, Bandurria Sur o El Orejano, que en menor tiempo lograron resultados similares.
Este centro operacional, donde se construyeron las más importantes instalaciones de tratamiento de crudo, transporte y hasta de generación eléctrica de Vaca Muerta, continúa encabezando los récords de desempeño en perforación y fractura, con un promedio para la compañía de 251 metros por día en perforación y más de 190 etapas por mes de fractura, aumentando un 25% y 11% interanual.
También en el área, recientemente la petrolera informó que finalizó la perforación en Loma Campana de un pad con los 3 pozos más largos en Vaca Muerta con más de 4.200 metros de longitud horizontal, destacándose un pozo con una extensión superior a los 4.400 metros, liderando el ranking de los llamados súper pozos.
Allí también se comenzó a implementar el uso de la tecnología simul-frac como ejemplo de las mejoras de productividad que se vienen logrando en los últimos años, esto es mejorar en un 30% el aprovechamiento de la capacidad de los equipos para avanzar en la fractura de dos pozos en simultáneo.
El área que abarca una extensión de 290 Km2 (1% de Vaca Muerta) no sólo es exponente de la convergencia de las mejores prácticas de la industria de los hidrocarburos, sino también de la digitalización con herramientas disruptivas como la inteligencia artificial, la big data, la realidad aumentada o la internet de las cosas aplicadas a mejorar la productividad, reducir los costos y hacer más eficiente la producción.
Actualmente, es el banco de pruebas del primer equipo fracturador de producción nacional cuya innovación es la utilización de gas natural como combustible, lo que permitirá ahorrar millones de litros de gasoil en Vaca Muerta por año y reducir las emisiones en las operaciones de upstream.
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