GNL: la posición geopolítica de Argentina abre oportunidades
El país puede convertirse en un proveedor global de GNL para Europa y los mercados regionales, pero debe generar condiciones para invertir.
Las proyecciones marcan que la demanda mundial de GNL aumentará considerablemente en los próximos años. Argentina tiene la oportunidad de convertirse en un proveedor de gas a nivel global, especialmente para Europa y los mercados regionales.
En este sentido, Gabriela Aguilar, vicepresidenta para Sudamérica y Country Manager Argentina en Excelerate Energy, consideró que es necesario trabajar en la infraestructura adecuada y generar condiciones que atraigan inversiones para desarrollar proyectos de GNL a largo plazo.
Además, ponderó que es necesario pensar en un modelo donde la exportación sea continua durante todo el año, como ocurre en países competidores, para garantizar la viabilidad de las inversiones.
Las proyecciones marcan que, para el 2040, la demanda global de GNL alcance los 700 MTPA, que sería casi el doble de los valores actuales: 400 DPA. Esto significa que la demanda se duplicará en un período de 20 años. Para el año 2030, se prevé que se incorporen entre 70 y 130 MTPA adicionales, principalmente provenientes de Catar y Estados Unidos.
“A partir de ahí empieza a encarrilarse lo que es la demanda y la oferta. La demanda va a empezar a crecer muy por arriba de la oferta existente”, sostuvo Aguilar en el marco de la Semana de la Ingeniería 2023 celebrada por el Centro Argentino de Ingenieros (CAI),
Este panorama tendrá efectos inmediatos. El principal estará puesto en predecir los precios del GNL a largo plazo, ya que han variado considerablemente en el pasado. Sin embargo, se espera que la escasez de oferta en relación con la demanda impacte en los precios. “Hemos visto precios de 15 dólares, pero históricamente rondó los 6 o 4 dólares, después subió a 40 o 30 dólares. Hoy estamos en 20 dólares, pero se puede pensar en estabilizarse en 15 a largo plazo. En la medida que haya una oferta más restringida, respecto de la demanda, ahí va a estar impactando el precio de largo plazo”, consideró la Country Manager Argentina de Excelerate.
Este escenario es propicio para el ingreso de Argentina como proveedor de GNL a los mercados mundiales debido a su posición libre de conflictos.
“Siempre pensábamos que Argentina pueda ir a buscar los mercados asiáticos, pero existen los cisnes negros, como pasó con la invasión de Rusia a Ucrania y acá se incorpora conceptos que antes no estaban como el de la seguridad en de la dependencia energética. Hoy es un valor. Nosotros tenemos negociaciones y operaciones tanto en Asia, Europa y Estados Unidos. Tenemos el valor de estar libres de conflictos”, consideró.
El desarrollo de proyectos de GNL requiere una planificación a largo plazo y grandes inversiones. Estos proyectos suelen requerir inversiones de al menos 2 mil millones de dólares, sin tener en cuenta el resto de la infraestructura necesaria, como instalaciones de licuefacción y transporte. En total, estos proyectos podrían ascender a unos 6 o 7 mil millones de dólares. Por lo tanto, es esencial generar credibilidad y atraer inversiones para llevar a cabo estos proyectos a gran escala.
Para Aguilar, es importante tener en cuenta que los países con los que Argentina compite en el mercado de GNL, como Estados Unidos, Egipto e Israel, tienen una mentalidad de exportación constante durante todo el año. La capacidad de exportación continua se debe a la presencia de terminales de importación y a la necesidad de mantener la seguridad y la sostenibilidad de la demanda interna.
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