Casi la mitad de los argentinos tiene problemas para pagar su factura de electricidad
Un informe de Accenture New Energy destaca que uno de cada tres hogares enfrenta desafíos para pagar su factura. Es uno de los porcentajes más altos del mundo.
El 45% de los consumidores argentinos ha tenido problemas para pagar sus facturas de electricidad en el último año. A nivel países, se trata del porcentaje más alto del mundo, ya que el promedio global es del 37%. Este dato se desprende del estudio “Accenture new energy. Consumer survey 2024”.
“Los consumidores están teniendo problemas para pagar sus facturas en todos los países que participaron del sondeo, y esta tendencia se observa acentuada en Argentina”, puntualiza el reporte que relevó la opinión de 16.800 consumidores a nivel mundial.
Según el estudio de Accenture, uno de cada tres hogares enfrentó desafíos para pagar su factura en los últimos 12 meses. En Argentina, se trata del 45% de los consumidores, el promedio más alto a nivel país. En cuanto a la región, el porcentaje trepa al 47%.
Más allá de la coyuntura local - con recesión y baja de subsidios, como variables extra- el estudio hace foco en la geopolítica para explicar el aumento del costo eléctrico en todo el mundo. “En 2022-23, una combinación de factores creó la tormenta perfecta para que las facturas de energía de los consumidores se dispararan”.
En este punto, los analistas señalan que la demanda de energía aumentó rápidamente en la pospandemia y que la guerra entre Rusia y Ucrania provocó que los precios del gas natural se dispararan. “La interrupción de la cadena de suministro, la demanda global de materias primas y la inflación general empeoraron las cosas, contribuyendo aún más al aumento de los precios. Como resultado, los consumidores están luchando para pagar sus facturas de electricidad”, afirman los especialistas.
El costo de la transición
Al dato del 47% con problemas para pagar por la electricidad consumida, se suma que el 83% de los argentinos está interesado en la transición energética, pero apenas el 33% quiere o puede pagar por iniciativas más sustentables.
De acuerdo al reporte, los consumidores con mayores ingresos estarían más dispuestos a pagar más por energía más limpia. Sin embargo, dos tercios de los consumidores argentinos encuestados no querrían o no podrían pagar extra para financiar la transición.
Asimismo, el 46% de los consultados cree que su proveedor de energía no destinará esos fondos a medidas sustentables. “Los proveedores de energía pueden mejorar sus relaciones con los consumidores, siendo más claros en sus comunicaciones a través de las facturas y de sus plataformas. Es importante que se entienda qué significa cada variable y cada concepto cobrado, al igual que cómo mejorar sus consumos”, afirma Ruiz Moreno.
Más allá de la sustentabilidad, el estudio mostró también que 59% de los consumidores argentinos identifica la asequibilidad y fiabilidad como su prioridad en el servicio eléctrico y solo 23% dijo estar satisfecho en ese aspecto con el servicio ofrecido por su proveedor de energía.
Ruiz Moreno sostiene: “Nuestro estudio muestra también que 79% de los consumidores argentinos está preocupado por el futuro del medioambiente y, mientras que un 76% dice creer que los individuos tienen un importante rol que cumplir, mientras que un 68% sostiene lo mismo respecto de las corporaciones”.
Asequible y oportuna
En este contexto, ¿cuál es la transición energética posible? Para responder a esta pregunta, los analistas hacen un repaso por los números del proceso: se requiere una inversión de 115 mil millones de dólares hacia el año 2050. Esta cifra se desglosa en 53 billones en generación de energía limpia, 42 mil millones en transmisión y distribución, y 20 mil millones en combustibles fósiles intermedios y tecnologías alternativas como la captura de carbono.
“Los proveedores de energía no pueden asumir solos los costos de inversión. Según análisis relacionados, completar las inversiones requeridas más que duplicará los costos de electricidad como porcentaje del ingreso familiar”, explica Ruiz Moreno.
Y agrega una verdad a voces: “Los consumidores no pueden permitirse apoyar esta escala y ritmo de inversión. Y mantener la transición asequible retrasará el logro de cero emisiones netas por 35 años. En este escenario, los proveedores de energía se enfrentan al desafío de equilibrar una transición asequible con una oportuna”.
Líderes de la transición
Para terminar, al ser consultados sobre qué beneficios esperarían en el caso de que sus cuentas eléctricas subieran por incluir iniciativas más sustentables, la mayoría respondió que un sistema energético más fiable, seguido por programas que les ayuden a bajar el costo de sus cuentas e información sobre las medidas que está adoptando su proveedor energético a favor del medioambiente
En este punto resulta evidente que el desafío de la transición energética no solo es de financiamiento. “Todos tienen un papel que desempeñar para que la transición a cero emisiones sea asequible: los consumidores, las comunidades y los reguladores. Pero los proveedores de energía deben liderar, ser los orquestadores. Son responsables de gestionar el equilibrio entre el acceso equitativo a la electricidad para los consumidores y de desarrollar un sistema energético confiable y seguro capaz de satisfacer la creciente demanda”, concluye Ruiz Moreno.
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